Preguntas frecuentes
Seguridad de los alimentos y el agua potable en Fukushima y en todo Japón
En Japón, las normas de seguridad alimentaria relativas a radioisótopos en los alimentos se han fijado en los niveles más estrictos del mundo, y los productos alimenticios de Fukushima y de todo el país se someten a rigurosas inspecciones.
El límite de Japón para los radioisótopos en los alimentos se ha fijado en un nivel seguro (1 mSv/año o inferior), por lo que el riesgo de efectos sobre la salud a causa del consumo normal es insignificante. Este nivel está dentro de los niveles de orientación establecidos por la Comisión del Codex Alimentarius, un comité internacional que establece normas de seguridad alimentaria.
En las regiones productoras de alimentos de Fukushima se han puesto en práctica medidas como el control de fertilizantes, de acondicionadores de suelo y de suelos de cultivo para limitar la transferencia y absorción de radioisótopos en cultivos y ganado. Los productos agropecuarios, forestales y pesqueros se someten antes de su distribución a inspecciones de control, cuyos resultados se difunden públicamente.
Gracias a las medidas aplicadas, los niveles de radioisótopos en los alimentos ha disminuido continuamente año a año. En los últimos años casi no ha habido casos de cesio radiactivo por encima del límite superior (100 Bq/kg en alimentos generales, 50 Bq/kg en leche).
Suponiendo hábitos de consumo promedio, la exposición debida a la ingesta de alimentos alcanza un nivel insignificante de alrededor de 0,0005-0,0010 mSv/año. Esto corresponde a aproximadamente un 0,1 % del límite superior (1 mSv/año). Por lo tanto, es improbable que tenga efecto alguno sobre la salud.